Perú ¿Treinta años más?

Análisis de la crisis política en el Perú, entre los años 1990-2020.

Por José Manuel Aroste

En política, como en el instituto, quién eres se define en gran medida por la gente con quien te sientas a almorzar, y no cabía ninguna duda de que la Tierra se estaba sentando a la mesa de los perdedores. (John Scalzi).

Caminando por Plaza de Armas de Lima, doña Yolanda me explica y recuerda lo bello que es el Perú. Catedrales, iglesias y el palacio de gobierno, se pueden observar desde el centro, doña Yolanda se detiene frente al palacio y me dice con tono de poca esperanza “Mire joven, en los últimos 30 años de ese palacio solo han salido políticos corruptos y mentirosos que solo le han robado al pueblo.” El caso de doña Yolanda es el de muchos peruanos que identifican las últimas 3 décadas como el periodo con más corrupción en el Perú.

Para poder comprender los 30 años de crisis política en nuestro país primero tenemos que saber a qué nos referimos cuando decimos “Crisis política”, comprender los términos que empleamos a la hora de expresarnos es importante para saber realmente la magnitud del asunto referido. Si se busca “Crisis política” en Google el concepto que se obtiene es el siguiente “Falta de orden en el sistema político y la sociedad, desequilibrios en el enfoque macro socio-político de un país o una región”. Este concepto es acertado, pero demasiado general para lo que realmente se quiere comprender y analizar en esta investigación.

El panorama actual de la política peruana es desalentador y no se logra vislumbrar una solución. Lo que pretende analizar esta investigación es la precaria y particular crisis en la gestión presidencial que Perú tiene en los últimos años. 

 

El baile del chino (1990-2000)

La lectura que se tiene del gobierno de Alberto Fujimori entre la población es que fue un momento de mucho tránsito, de una economía que había que levantar con una serie de medidas que podrían llegar a ser impopulares en algunos casos pero que eran necesarias dada la crisis en la cual se recibió el anterior gobierno. Sin embargo, durante este gobierno se desarrollan una serie de lineamientos, sobre todo de una política económica que finalmente no favorece a las personas de clase media para abajo y esto aunado a un fuerte discurso que existía sobre el combate al terrorismo lo cual ha generado un escenario disparejo entre personas que están a favor y en contra. El Prof. de Historia de la UCSS, Santiago Tácunan, lo describiría así:

En realidad, lo que se vivió en ese gobierno fue un espacio muy dramático respecto al manejo económico, a la libertad de prensa y la aplicación de una serie de mecanismos que resultaron totalmente antidemocráticos, ilícitos y que finalmente provocaría un rechazo a todo lo bueno que se hizo respecto al tema de infraestructura, vías de comunicación, educación, etc. Todo esto se ha visto mermado por la ola de corrupción que no conocíamos y que cuando sale a la luz pública genera la caída de este régimen.

Actualmente, Fujimori se encuentra en prisión desde 2007, condenado a 25 años de cárcel por su autoría mediata en las ejecuciones extrajudiciales de 25 personas. Se declaró culpable en tres casos de delitos de corrupción. Asimismo, de acuerdo con la transparencia internacional, Alberto Fujimori es uno de los ex líderes más corruptos del mundo, se calcula que durante su gobierno de los US$ 9,221 millones de la privatización de las empresas públicas, solo ingresaron a las arcas del Estado: 6,445 millones. En la década fujimorista se perdieron anualmente US$ 2.038 millones por la corrupción de funcionarios. Sin duda alguna, Fujimori significó un periodo de impunidad y descaro en la historia del Perú, una etapa que los peruanos tienen que reconocer, pero sobre todo no tienen que olvidar.

 

La limpia transición (2000-2001)

El gobierno de Valentín Paniagua tenía un objetivo muy concreto y puntual, el de la convocatoria a elecciones. Durante su gobierno no hubo tiempo para desarrollar una política pública de impacto o a gran escala. Sin embargo, es un gobierno que se recuerda porque permitió de alguna manera el retorno a las sendas de la democracia que había sido violentada en el gobierno anterior a causa de las reelecciones con ciertos hilos de fraude pero que finalmente no terminaron por ser analizadas a profundidad.

Paniagua recibió sorpresivamente gran apoyo del congreso, se comprende que esto sucedió a causa de la presión social que existía y cumplía con observar las trabas que el congreso podría presentar a este gobierno de transición. El mismo Valentín Paniagua realizó actos honestos y públicos asegurando que no pretendía postular a la presidencia para que no haya indicios de algún interés en particular, esto es algo que se puede rescatar de su persona, su transparencia al momento de decir con sinceridad que en realidad quería lo mejor para el país y lo mejor no era necesariamente que esté al frente, sino que la gente pueda decidir, pero también que asuma la responsabilidad de sus actos. Tal como lo describe Roberto Ortiz de Zárate:

El presidente constitucional del Perú entre noviembre de 2000, a raíz de la renuncia del desacreditado Alberto Fujimori, y julio de 2001, cuando tomó el testigo el mandatario electo Alejandro Toledo, tuvo la responsabilidad de dirigir el país andino en una etapa transitoria pero delicada en la que estaba en juego la regeneración democrática de las instituciones tras una década de régimen fujimorista caracterizada. por los abusos de poder, la corrupción y los desmanes criminales. Llegado el momento de la muerte de Valentín Paniagua, en octubre de 2006, la clase política y la opinión pública peruanas fueron unánimes en destacar como logros de este veterano político con una sincera vocación de servicio al pueblo la rendición de cuentas ante la justicia por Fujimori y su colaborador Vladimiro Montesinos, y la celebración en abril de 2001 de unas elecciones generales con las debidas garantías democráticas.

 

El gobierno de la chakana (2001-2006)

Luego de 10 años de un régimen fujimorista y gracias a la transición limpia de Valentín Paniagua, Alejandro Toledo llegaría a palacio de gobierno con suma esperanza entre la población, se decía por las calles “Ha vuelto la democracia”, “Toledo es el hijo del pueblo” “Todo estará mejor”, pero verdaderamente ¿Todo cambió? ¿Mejoró en algo el país durante este gobierno? El discurso que utilizó Alejandro Toledo para llegar a ser presidente se basaba principalmente en recuperar las sendas de la democracia y lograr una sociedad en la que todos los peruanos trabajemos por un País mejor ¿Verdaderamente eso fue lo que pasó? Tácunan diría al respecto:

Todo candidato siempre tiene que usar un discurso popular para llamar la atención sobre quienes tiene de frente, frecuentemente se identificarán como aquel personaje comprensivo, humilde y honesto, todo esto solo queda en discursos que sirven para contentar a sus simpatizantes. Yo no me imagino a un candidato que no haga promesas en una campaña electoral, no imagino que diga con sinceridad lo dramático que serán los próximos 5 años en una posible gestión, eso no es lo que quiere escuchar el elector, los candidatos saben perfectamente esto y partiendo de ese punto, forman un discurso en algunos casos mal elaborados pero que finalmente dan resultados.

Durante la gestión de Alejandro Toledo se realizaron grandes obras tales como “La carretera interoceánica” pero que finalmente terminarían por ser parte de intereses empresariales y casi inútiles en contribución a la economía nacional. Muchas obras realizadas durante esta gestión significaron grandes gastos para el país, gran parte de ellas fueron financiadas con préstamos internacionales que harían crecer la deuda del país.

Actualmente, el Estado peruano viene tramitando ante EEUU el pedido de extradición del expresidente Alejandro Toledo por el caso Odebrecht y Ecoteva. El ex El director ejecutivo de Odebrecht, Jorge Barata, señaló a autoridades judiciales de Perú y Brasil que sobornó a Toledo con el pago de 20 millones de dólares. Según El Comercio, Josef Maiman confirmó el pago de las coimas.

 

La segunda oportunidad (2006-2011)

Luego de un gobierno desastroso entre los años 1885-1990, Alan García es electo nuevamente presidente del Perú, las expectativas entre gran parte de población eran desalentadoras debido a sus antecedentes como mandatario. García ingresa con cierto temor e incertidumbre debido a las acusaciones jurídicas por las que era investigado, las mismas que ya habían sido prescritas. Su segunda gestión es recordada por las tendencias económicas que resultaron favorables debido al incremento de precios en mercados internacionales, Perú al ser un país dependiente económicamente, gozó de una cierta estabilidad económica que se proyectó en el crecimiento de empleos, generando así una sensación agradable entre la población.

García trató de hacer algunas obras importantes y otras que resultaron muy escandalosas, tales como la venta del El Aero club de Collique a los grandes consorcios. En síntesis, se podría decir que fue gobierno que pasó desapercibido pero que enfrentó grandes acusaciones y enfrentamientos en El Congreso, sin embargo, contó con grandes representantes que cumplían el rol de “escuderos” al momento de argumentar los debates en las comisiones de investigación (Santiago Tácunan).

Durante su segundo gobierno, García indultó a narcotraficantes, la Comisión de Gracias Presidenciales estuvo encabezada por Facundo Chinguel, preso en el penal Ancón II. El mayor escándalo de corrupción con el que se le ha relacionado han sido los Petroaudios.

Debido a su intencional deceso, las investigaciones contra García cesaron, pero se sigue investigando por parte de la Fiscalía el resto de imputados en casos como la construcción de los tramos I y II de la Línea 1 del Metro de Lima.

 

La transformación de Humala (2011-2016)

Tras disputar la segunda vuelta contra Keiko Fujimori en 2011, Ollanta Humala es electo por mayor cantidad de votos, convirtiéndose en el presidente del Perú. La campaña que realizó para lograr este objetivo se centró en tendencias de cambio y militares. Se puede rescatar de su gestión el impulso con programas sociales que tenían en consideración tanto a los adultos mayores como a infantes. Humala trató de incursionar en algunos sectores de la sociedad, en espacios urbanos y rurales donde realmente hacía falta la presencia del Estado. Asimismo, en su gestión se buscó constantemente el incremento del salario laboral, en este aspecto, Ollanta se centró en oficios como profesores y policías. Además, se implementó mejor capacitación a los oficiales de policía, estas acciones se comprenden que fueron realizadas debido al reconocimiento personal que tenía Humala en las carencias del sistema policial.

Uno de los proyectos más importantes que realizó el expresidente Ollanta Humala fue el de los centros de formación técnica, comprendiendo que no todos logran ingresar a la educación universitaria, desarrollo este proyecto verdaderamente interesante que tenían por nombre “Centros de Innovación Tecnológica” esto ha permitido crear un espacio en el que muchos jóvenes han podido lograr algún tipo de capacitación técnica o incursionar en algún negocio dentro del mercado laboral (Santiago Tácunan).

 Por otro lado, Humala se ha visto involucrado en casos de corrupción, muchos de ellos relacionados con la empresa brasileña Odebrecht. El 13 de Julio del 2017, El Poder Judicial le dictó 18 meses de prisión preventiva por los delitos de lavado de activos en detrimento del Estado y asociación ilícita para delinquir.

 

Cuatro presidentes en cuatro años (2016-2020)

Según señala Andrés Suarez, Pedro Pablo Kuczynski es elegido presidente para el período 2016 – 2021, pero en menos de dos años al mando fue destituido por el Congreso.  En su contra pesó una acusación de haber recibido, en su época de ministro, coimas de parte de Odebrecht, para facilitarle la construcción de la polémica carretera Interoceánica. Quien orquestó el proceso de moción de censura en contra de Kuczynski fue la lideresa de la oposición, Keiko Fujimori, hija de Alberto Fujimori, con quien Kuczynski había batallado las elecciones presidenciales. Kuczynski también fue relacionado en un proceso de lavado de activos, de manera que la justicia peruana le imputó 36 meses de prisión domiciliaria preventiva, mientras avanzan las investigaciones. Tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski el 23 de marzo de 2018, quien lo sucedió fue su vicepresidente Martín Vizcarra. El caso de Vizcarra es particular porque como presidente disolvió el Congreso en lo que llamó una cruzada contra la corrupción. Pero tras más de dos años en el poder, el propio Congreso lo destituyó luego de adelantar en su contra dos mociones de censura, una primera fallida, y una segunda con aplastante resultado para removerlo de su cargo. La vacancia o destitución fue argüida por unos presuntos actos de corrupción de cuando Vizcarra fungía como Gobernador de la región de Moquegua. A pesar de que Vizcarra negó dichas acusaciones, y sin haberse expuesto pruebas fehacientes en su contra, el Congreso decidió inhabilitarlo.

También, como indica Frank de la Cruz, Manuel Merino asume el cargo de jefe del ejecutivo, como le competía constitucionalmente por ser el presidente del Congreso. Las reacciones fueron varias, pero el sentir popular no se hizo esperar y comenzaron las manifestaciones en las calles de la capital y provincias. A medida que pasaban los días, las protestas fueron escalando debido a los actos de los involucrados en el proceso de vacancia. Asimismo, mientras las protestas continuaban y aumentaba el número de participantes, la indignación aumentaba debido a la brutalidad de la represión policial. La presencia del grupo terna en las manifestaciones, el uso de lacrimógenas y perdigones dejó un saldo irreparable: dos víctimas mortales. Sucedido esto, iniciaron las renuncias en cadena del gabinete Flores-Aráoz y la renuncia de los vicepresidentes de la mesa directiva del Congreso. Finalmente, como indica la BBC, Merino renunció a la presidencia presionado por la población.
El Congreso escogió, tras rechazar la primera lista, una nueva mesa directiva para salir de la crisis. Así, se completó el proceso y Francisco Sagasti juramentó como presidente interino de Perú al ser elegido nuevo presidente del Congreso, llegando así, a la cifra de cuatro presidentes en menos de cuatro años. Una crisis política que empezó en 2016 tras los resultados de las elecciones, las cuales dieron como ganador a Pedro Pablo Kuczynski y una mayoría de oposición en el Congreso.

 

¿Hay solución?

Al final, podemos deducir que el Perú verdaderamente está pasando por una crisis política alarmante. Si se tuviera que resumir las últimas tres décadas en una sola palabra, esta sería “frustración”. Esta palabra calza perfecto para describir el sentimiento que existe no solamente entre la población, sino también por parte de los propios actores políticos, esta sensación la experimentan mediante la exposición de sus manipulaciones, casos de corrupción que salen a la luz. Pero la palabra frustración también viene por parte de la población que, de manera tardía, viene comprendiendo que las elecciones en las que se ha participado finalmente no han sido favorables. Al mismo tiempo, los peruanos estamos en la obligación de reconocer el poder que tienen en la acción de ir a votar, que involucra tan solo un par de minutos, pero que finalmente determinan nuestros cinco próximos años.

En cuanto a si se vislumbra o no una solución entre tanta crisis política que atraviesa el Perú, se concluye que existe específicamente una tarea que tendríamos que hacer todos los peruanos, y es la correcta información que tiene que manejar cada uno para poder participar en política. Tendríamos que, necesariamente, involucrarnos en política con el fin de elegir mejores mandatarios y representantes.

 

 

 

 

 

 

Bibliografía

1. Gabriela Flores, Magali Zevallos, Antonio Zapata (2021) Radiografía de la Corrupción (consultado el 18/04/2021)

http://elgranangular.com/radiografiadecorrupcion/

 

2. IDEHPUCP (2021) La percepción de la corrupción en el Perú en los últimos años (consultado el 23/04/2021)

https://idehpucp.pucp.edu.pe/notas-informativas/la-percepcion-de-la-corrupcion-en-el-peru-en-los-ultimos-anos/

 

3. Jaramillo Andrés (2020) En los últimos 30 años, Perú contabiliza 6 presidentes acusados de corrupción (consultado el 26/04/2021)

https://www.france24.com/es/programas/historia/20201117-en-los-%C3%BAltimos-30-a%C3%B1os-per%C3%BA-contabiliza-6-presidentes-acusados-de-corrupci%C3%B3n

 

4. Manetto Francesco (2020) Todos los hombres de la corrupción en Perú (consultado el 15/04/2021)

https://elpais.com/internacional/2020-11-10/todos-los-hombres-de-la-corrupcion-en-peru.html

 

5. Quiroz Alfonso (2013) Historia de la corrupción en el Perú (28/04/2021)

https://books.google.com.pe/books?id=i0ItCgAAQBAJ&printsec=frontcover&dq=Libros+de+la+historia+de+la+corrupci%C3%B3n+alfonso&hl=es&sa=X&ved=2ahUKEwj9kqX12eLwAhUeIrkGHXXdCMoQ6AEwAHoECAkQAg#v=onepage&q=Libros%20de%20la%20historia%20de%20la%20corrupci%C3%B3n%20alfonso&f=false

 

6. Roberto Ortiz de Zárate. ( 29 febrero 2016). Valentín Paniagua Corazao. 25/06/2021, de CIDOB Sitio web: https://www.cidob.org/biografias_lideres_politicos/america_del_sur/peru/valentin_paniagua_corazao

 

7. de la Cruz, Frank. (2020, 10 diciembre). Perú ha tenido cuatro presidentes en tan solo cuatro años. Chiqaq News. https://medialab.unmsm.edu.pe/chiqaqnews/peru-ha-tenido-cuatro-presidentes-en-tan-solo-cuatro-anos/

 

 

 

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