Por Giampiero Gambaro.
En un boletín digital llamado The Convivial Society, el autor L. M. Sacasas publicó recientemente una lista de 41 preguntas que podríamos hacernos sobre nuestro uso de las diferentes tecnologías digitales[1]. Su primera pregunta es ¿Qué tipo de persona hará de mí el uso de esta tecnología? Y luego le sigue ¿Qué hábitos me inculcará el uso de esta tecnología?
Parte de lo que me gusta del trabajo del Sr. Sacasas, es su reconocimiento de que diferentes tecnologías pueden tener distintos efectos. Mi respuesta sobre qué tipo de persona me hace Facebook, es totalmente diferente a los efectos que Kindle causa en mí, así con mis correos entre compañeros de trabajo y de oficina, o los mensajes de texto en mi teléfono.
Mientras que la mayoría de las tecnologías que utilizamos tienden a crear una relación profundamente personal, del tipo ‘yo y Jesús’, las preguntas del Sr. Sacasas siguen llamándonos a nuestra red de relaciones interdependientes más amplia, con preguntas como ¿Me aporta alegría el uso de esta tecnología? ¿A costa de quién?
La cuestión de cómo una determinada tecnología puede imponerme límites a mí, está igualmente unida a cómo puede imponer límites a los demás. Al igual que Santo Tomás de Aquino, el Sr. Sacasas nos recuerda que cada elección de nuestra vida, ya sea qué tecnología compramos, cuándo o cómo la usamos, tiene una dimensión moral y ética que hay que considerar. Cada acción es una acción moral.
Así que les propongo aquí mi breve adaptación, para los católicos, de las preguntas del Sr. Sacasas. Piensa en ella como un examen de conciencia espiritual para la tecnología digital.
1. Empiezo a poner en mi mente un tipo particular de tecnología digital que me gusta usar, pidiendo a Dios que bendiga mi reflexión, para que pueda ver mi experiencia de esa tecnología más claramente.
2. ¿Qué tipo de sentimientos genera en mí el uso de esta tecnología? ¿Cómo me siento mientras la uso y después?, San Ignacio dice que el consuelo de Dios es como una gota de agua que suavemente empapa una esponja, mientras que las tentaciones de los malos espíritus son como el agua que golpea una roca: duras y confusas. Esta tecnología, ¿me hace sentirme consolado o confundido?
3. ¿Qué tipo de hábitos o deseos me inculca esta tecnología? ¿Me parece que me invita a una mayor generosidad, apertura, esperanza, caridad, curiosidad o amistad?
4. ¿Qué visión del Reino de Dios promueve esta tecnología? ¿A quién se le invita a tener un asiento en la mesa? ¿A quién se borra o se excluye? ¿A quién se ridiculiza?
5. ¿Qué me enseña esta tecnología sobre mí mismo y sobre los demás? ¿Son precisas esas lecciones? ¿Me conozco mejor a mí mismo y a los demás como resultado de esta tecnología? ¿Me quiero más a mí mismo y a los demás?
6. ¿Cómo afecta esta tecnología a mi relación con Dios? ¿Alimenta mi vida espiritual de alguna manera? ¿Mi imaginación? ¿Mi sentido de la esperanza y de la gratitud, de la posibilidad y del placer?
Finalmente, tómate un momento para recoger las gracias de esta oración. Da las gracias por los regalos que has recibido a través de esta tecnología, y pide a Dios que te ayude con cualquier cosa que necesites cambiar.
Para ver la lista de preguntas completa de The Questions Concerning Technology, haz clic aquí.
Fuentes bibliográficas
[1] Sacasas, L. (4 de junio de 2021). The Convivial Society, The Questions Concerning Techonolgy. Consultado el 8 de agosto de 2021. https://theconvivialsociety.substack.com/p/the-questions-concerning-technology