Estudiantes de la UCSS brindaron talleres emocionales a familias migrantes, promoviendo salud mental.
Por: Cynthia Ganoza
El domingo 1 de diciembre, en Nievería – Huachipa, se llevó a cabo el taller «Bienestar Emocional para Familias Migrantes». Esta iniciativa fue organizada por los estudiantes del 8.º ciclo del curso de Terapia Cognitiva de la Universidad Católica Sedes Sapientiae, sede Tezza, bajo la dirección de la docente Cynthia Ganoza.
Cercanos a las fiestas, los estudiantes decidieron ofrecer algo diferente a los tradicionales regalos navideños: salud mental para las familias migrantes y refugiadas de Lima Este. En alianza con la ONG Cesal y con la participación voluntaria de la artista @petirojo.bc, este proyecto reafirmó el compromiso de la universidad de unir conocimientos académicos con valores humanos y sociales.
«Junto a los alumnos nos preguntábamos qué podríamos dar esta Navidad y decidimos dar salud mental. Al compartir nuestros conocimientos, recibimos a cambio experiencias que fortalecen nuestra vocación de servicio y nos recuerdan la necesidad de seguir aprendiendo y llevando nuestros saberes a donde pocos llegan», expresó la docente Ganoza.
Desarrollo de los Talleres
Se realizaron tres talleres, cada uno adaptado a las necesidades emocionales de diferentes grupos de edad:
- Niños de 4 a 7 años:
A través de cuentos y actividades creativas, los niños aprendieron a identificar y expresar emociones. La sesión culminó con la creación de la «Botella de la Calma», una herramienta para la autorregulación emocional, liderada por los estudiantes María de los Ángeles, Daniel y Diana. - Niños de 8 a 11 años:
Guiados por la artista @petirojo.bc y la alumna Pricila, los niños exploraron su autoestima y creatividad mediante el arte, en un ambiente que promovió la expresión y el empoderamiento personal. - Adultos:
En este espacio, los participantes reflexionaron sobre cómo adoptar una perspectiva más objetiva y flexible frente a los retos cotidianos. Bajo la dirección de los estudiantes Benjamín y Lucy, los asistentes realizaron ejercicios prácticos que les ayudaron a gestionar sus emociones de manera más efectiva.
Una participante del taller para adultos compartió:
«Siempre, cuando nos equivocamos, nos decimos cosas negativas o sacamos conclusiones rápidas, porque así hemos aprendido. Pero nos damos cuenta de que eso no nos ayuda, sino que nos bloquea.»
Este testimonio refleja cómo esta actividad ayudó a los asistentes a identificar patrones de pensamiento y fomentar su bienestar emocional.
El taller «Bienestar Emocional para Familias Migrantes» es un ejemplo conmovedor del impacto positivo que se genera cuando universidad, ONG y artistas trabajan juntos. Este proyecto no solo benefició a las familias migrantes, sino que también dejó una huella significativa en los estudiantes, preparándolos como profesionales comprometidos con la sociedad.
La Universidad Católica Sedes Sapientiae reafirma su misión de formar a sus alumnos integralmente y agradece profundamente a Cesal y a @petirojo.bc por su apoyo en esta experiencia transformadora, llena de aprendizaje mutuo y esperanza.
También te puede interesar: